Andarán de vacaciones

No las encuentro. Dónde demonios se habrán metido.
Hace ya días que las busco desesperadamente y no hay manera de dar con ellas. He mirado en todos los sitios que acostumbran a estar, en cada uno de los rincones de mi, en el aire, en el polen e incluso allá, en la línea que separa el mar del cielo... Pero nada. Se han volatilizado, joder. 

Las necesito. Ya no me sale nada y eso me preocupa. Necesito que me alumbren por las noches cuando no puedo dormir, que guíen y ordenen mis pensamientos cuando lo estoy haciendo, que manden sobre mis torpes dedos y los hagan funcionar casi automáticamente. Necesito que me lo dejen fácil.

Las echo de menos. ¡Resulta todo tan sencillo cuando me cubren totalmente con su capa y veo desde su interior lunas, estrellas, mundos, estaciones y camas! Damas blancas sin figura pero con rostro, llenas de vida, llenas de ti, alegrías y hiel. Llenas de risas, de penas, de furia devastadora y sosegada paz. ¿Donde coño estáis?

Tengo sed. Volver a refrescarme el alma con vuestra dulce pócima que emana la fuente! Saber de mi y comprobar la falta que me hacéis! Os espero con el alma abierta de par en par para que entréis frescas en mi y me poseáis. Hacedme el amor.

No las encuentro. Dónde demonios se habrán metido. Quizás el maestro Joan Manel  tenía razón. Quizás hoy las musas han pasao de mi... ANDARÁN DE  VACACIONES.

Pintura de Efraín Recinos - Las nueve neo musas