Regálame una flor
Tócame el pelo
Apriétame la mano cuando hace frío y llueve
Acaríciame la espalda
Róbame un beso delante de tu padre
Enrosca entre tus piernas la mía debajo de la mesa
Guíñame un ojo en medio de lo negro y de lo gris
Acurrúcate en mi pecho cuando casi ha amanecido
Ayúdame a no olvidar que soy una mujer...
Mil gracias Mery por esta joya regalada.
Abrazado a tu ausencia duermo con el consuelo y la emoción de volverte a sentir
ResponderEliminarQue palabras tan bonitas para iniciar un nuevo poema, EsLogan!!
EliminarMe alegra verte de nuevo por estos lares y por tus aportaciones poéticas.
besotes!!!
Precioso!!! ...y parece que el quid está en " ayúdame a no olvidar " ...
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